lunes, 23 de julio de 2012

FELICIDAD

La felicidad viene a invadirme y yo le abro mis trincheras, me convierto en su aliado y consigo hallar la paz en esta absurda guerra.

Por fin todo es alegría y la alegría lo es todo.

La gran sonrisa que se dibuja en mi cara, hoy es, sin duda alguna, el reflejo de mi alma.

N. del A. : Este escrito lo hice para un espectáculo de mi gran amigo y bailarín Juan (http://yanohaylapizypapel.blogspot.com.es/2011/06/juan-en-movimiento.html)

Hay dos escritos mas, que también alargué y pertenecen al mismo espectáculo.

Os dejo los links:
http://yanohaylapizypapel.blogspot.com.es/2011/02/vicios.html

 http://yanohaylapizypapel.blogspot.com.es/2011/01/amor-real-y-de-esto.html

Estos son los originales, luego estan los alargados, que también encontrareis en mi blog.

Espero que os gusten.

Muchas gracias por leerme!

FELICIDAD (ALARGADO)

La felicidad viene a invadirme y yo le abro mis trincheras, no quiero escudos que me protejan, de tan grato enemigo.

Me convierto en su aliada, para no tener que enfrentarme a ella y consigo hallar algo de paz, en esta absurda guerra.

Por fin todo es alegría y la alegría lo es todo.

Resulta imposible esconder, la enorme sonrisa que se dibuja en mi rostro.

Resulta sencillo caminar, cogida de la mano de este estado.

Sólo reflejo, lo que mi alma siente.

Sólo deseo, estar para siempre de su lado y no cambiar jamás de bando, no volver con la tristeza, no esconderme en mas trincheras.

LA FUERZA DE LOS ELEMENTOS

Le imploro a la fuerza de los cuatro elementos, que reuna el valor que a mi me falta, para decirte que muero de ganas porque vuelvas a mi lado.

Me convertiré en su siervo, si lo consideran necesario.

Moveré el AGUA de las olas del mar.

Plantaré árboles, en TIERRA fértil.

Con AIRE volaré, hacia donde me lleve el viento.

Me quemaré en la lavas, hechas de FUEGO.

Ya no soporto ni un día más, sin el tacto de tus manos sobre mi piel, sin la humedad de tus besos en mi boca.

Me faltas tanto, que siento que ya no siento, que ya no veo, que ya no escucho, que ya no puedo hablar.

Porque solo quiero decirte, que te quiero y oír como tu me lo dices, ver tu rostro al despertarme, notar tu cuerpo junto a mi cuerpo.

Quiero volver a vivir, como si cada segundo, fuera el último segundo, en vez de esta agonía, que poco a poco, está matándome.

Le imploro a la fuerza de los cuatro elementos, que se den prisa, que lleguen a tiempo.