lunes, 24 de septiembre de 2012

PARIS

Enmudezco ante la grandeza de tanta belleza.

Mi voz no alcanza a decir todo lo que mi alma siente.

Cogida a tu mano, paseo por sus calles...

Nuestros cuerpos llenos de amor, la mirada llena de emoción...

Aquella cena en aquel barco...

Las vistas desde su torre...

El hotelito, las cenas en la habitación.

La sencillez en cada decisión que tomábamos.

Nos enamoramos en cada rincón, nos enamoramos de cada rincón...

Cinco días, pasaron en un breve segundo.

Nos dejamos sitios por visitar.

Tenemos una deuda pendiente con ella.

Regresar algún día, para volverla a admirar...

LO ABSTRACTO DEL TIEMPO

Horas que son minutos, minutos que son segundos...

Una estrella fugaz, en una noche de primavera...

Tumbados sobre la tierra, sin decir ni una palabra, compartimos el mismo deseo.

Nuestros cuerpos se acarician, las caricias se comparten, tus labios se humedecen, los mios tiemblan de deseo.

La sangre hierve dentro nuestro, los sudores se entremezclan...

 Excitados, palpitan nuestros corazones.

Las miradas se cristalizan, las manos no paran quietas.

El caos reina en la escena y aunque la ternura quede a un lado, el amor, tiene presencia.

Horas, minutos, segundos.

El tiempo es algo abstracto, cuando hacemos el amor.

EL CIELO EN TUS OJOS

Y ahora, que parecía que una nube gris rondaba por mi cabeza, apareces como un torbellino y haces salir al sol, ahora ya puedo ver la claridad de un inmenso cielo, lo veo en el azul de tus ojos, cada vez que te miro.

Siento brisa en mi cuerpo cuando me acaricias.

Lluvia en mis labios, cuando me besas.

Ahora que te siento tan cerca, no quiero pensar en un futuro, ni recordar ningun pasado, quiero vivir este presente, al lado de tu presente...

Voy a dejar mi mente en blanco, para que puedan entrar nuevas sensaciones, para que llenen todos los momentos, sin permitir llegar a un fin.

Ahora que he decidido algo tan grande, me siento de igual forma y para hacerlo mas creible, me miro en tus ojos y puedo ver el azul del cielo.