El halo de mi conciencia se transforma en unos cuernos de diablo.
Te sigo hasta el infinito por la ruta del mal.
Caigo de bruces delante de ti y con la poca fuerza que me queda,
me agarro a tus rodillas, escalo hasta tu entrepierna, consigo alcanzar tu pecho,

El hielo de tu mirada congela todo mi cuerpo.
Siento cuchillas en tus manos cuando tocan mi piel.
Oigo tus palabras tan bien dichas,
palabras que no quiero oír,
palabras que tu quieres decir.
Tu perfidia a derrotado a mi benevolencia.
Ángel caído del cielo que bebió del manantial de las lavas del infierno.
Perdí mis alas por ti y tu sigues creyendo que esto solo es un juego.
OLEE!! increible!!!
ResponderEliminarTE REGALO MI CIELO AMIGA!!
ResponderEliminarMejor compartiremos el mismo trozo de este azul tan inmenso...
ResponderEliminarPrecioso!
ResponderEliminarPero que angel caido de los cojones.... ese es el puto demonio. Ademas creo que la inspiración te vino despues de ver a Moises y los doce mandamientos..jejejejeje.
ResponderEliminarAhora en serio, estoy sorprendido de tu apasionamiento, esta faceta la desconocía de tu personalidad. Un besote
Gracias por visitarme =) Y seguirme (L)
ResponderEliminarBuen finde!
Con frecuencia en lo malo o no recomendable encontramos lo que verdaderamente nos inspira y donde siempre estuvo nuestro lugar. Aunque para eso haga falta destruir quien hemos logrado ser para convertirnos en quien nunca quisimos.
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